La mama tuberosa o tubular se trata de una malformación que se produce durante la fase de desarrollo durante la pubertad. Los pechos tuberosos suelen presentar una rigidez excesiva en el tejido de la mam, que impide que la glándula mamaria se expanda con normalidad.
La cirugía de pechos logra paliar este problema, obteniendo una forma correcta en el seno, a partir de una operación de mamas tuberosas adaptada a cada paciente.
En la Clínica Murillo buscamos siempre el mejor resultado, analizando tu caso particular con el fin de obtener el mejor resultado en una operación de mamas tuberosas, con una gran experiencia en este campo.
¿Qué son las mamas tuberosas o pechos tubulares?
Una mama tuberosa o pecho tubular es una deformación de uno o ambos senos, que normalmente adquieren una forma tubular (o en forma de "cono"). Comienza a manifestarse en la pubertad, durante la época de desarrollo.
Muchas pacientes desconocen que tienen un pecho tuberoso, y simplemente refieren que tienen unas "mamas pequeñas y con forma rara".
¿Cómo sé si tengo mama tuberosa?
El pecho tuberoso es un diagnóstico clínico,. Las características de forma del pecho tuberoso son las siguientes:
Cómo se corrige un pecho tuberoso
La corrección de la mama tuberosa es necesariamente mediante cirugía. Con una operación seremos capaces de mejorar el aspecto del pecho, su forma y naturalidad además del tamaño.
La mayor parte de correcciones de pecho tuberoso pasan por realizar lo siguientes pasos:
¿Qué cicatrices tendré después de una operación de mamas tuberosas?
Cada caso de pecho tuberoso es diferente, pero la mayor parte de las pacientes tendrán una cicatriz circular alrededor de la areola (cicatriz periareolar). Esto es así porque se usa un acceso por la areola para tratar la glándula y mejorar el tamaño y forma de la misma. Esta cicatriz suele quedar muy bien en la mayor parte de los casos ya que queda escondida en el cambio de color entre la areola y la piel. En algunos casos más infrecuentes la corrección se puede realizar únicamente mediante una pequeña cicatriz en el surco o en pechos tuberosos y caídos mediante una cicatriz en T invertida.
Recuperación y postoperatorio de la operación de mama tuberosa
Tras la operación, se evalúa el estado del pecho, lo habitual es que la paciente reciba el alta 24 horas después de la intervención. La mayor parte de las intervenciones de pecho tubular o tuberoso se realizan con anestesia general. Se recomienda llevar un sujetador especial y también una banda torácica.
Es frecuente que se produzcan dolores o molestias (generalmente leves y controlables con medicación analgésica habitual), en cualquier caso. Pocos días después de la operación se lleva a cabo una nueva evaluación para comprobar la evolución del seno. Los puntos suelen quedar internos para que no se vean. En la mayor parte de casos, se puede retomar una actividad laboral que no requiera esfuerzo físico intenso a los 7-10 días.
En las primeras semanas, la forma y tamaño de los implantes no será el definitivo. Poco a poco el implante irá distendiendo la piel y el resultado se irá haciendo más natural y proporcionado. Esto se produce de manera más llamativa en los pechos tuberosos que en los normales, ya que no hay que olvidar que el pecho tuberoso se basa en un déficit de tejidos en el polo inferior. En ocasiones hay que esperar hasta un año para ver el resultado completamente definitivo.
Consúltanos por tu caso concreto y un especialista te ofrecerá atención personalizada en nuestras clínicas, donde tratamos mamas tuberosas en Vigo y Pontevedra.
Estimado paciente:
Esta información, no es más que una simple orientación sobre las distintas intervenciones y tratamientos médicos, realizados en el ámbito de la Cirugía Plástica Reparadora y Estética, y en ningún caso sustituyen a la información que podrá darle su cirujano en la consulta.
En caso de duda o información más detallada contáctenos. Tendremos todo el placer en atenderle y explicarle cualquier aspecto relacionado con la intervención o tratamiento en el cual este interesado. un saludo
Dr. Diego Murillo Solís